El bienestar animal, el ejercicio que realizan y la alimentación natural en pastoreo (bellotas, helechos, castañas, zarzas, hierba y raices) son el secreto para obtener una carne de cerdo excepcional.
Carne bien formada, de sabor intenso y agradable y con un porcentaje de grasa reducido.
El lomo de cerdo es la chuleta sin el hueso y se caracteriza por ser una pieza muy limpia y tierna. Además, la alimentación y el ejercicio que realizan nuestros cerdos le proporcionan a los lomos la infiltración necesaria para destacar por su increíble sabor.
Estos lomos son introducidos en una salmuera (sal mineral Ecológica de Añana) durante 72 horas, tras este procesa se le añade el pimentón (D.O. de La Vera), especias y aceite de oliva virgen (Sierra Mágina).